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El chico con pies de hierro es un libro enfocado al público juvenil, lleno de creatividad e imaginación. A pesar de no llegar a las doscientas páginas, esta novela toca muchos temas muy interesantes. Os animamos a descubrir unas cuantas en esta reseña.
El chico con pies de hierro es la novela de un youtuber diferente: él no hace streaming de videojuegos ni nada por el estilo ya que lo suyo es la ilustración.
El argumento de El chico azul con pies de Hierro
El protagonista de este libro se llama Néstor y vive en Granada. Un día como otro cualquiera, Néstor decide participar en un concurso de relatos. En el libro nos contará algunas de sus aventuras. Néstor tiene mucha imaginación y al estar escrito el libro en primera persona provocará que no sepamos qué forma parte de la realidad y qué no. A su lado recorreremos las calles de Granada y descubriremos la magia que esconde.
Los protagonistas de El chico azul con pies de Hierro
En el libro salen muchos personajes, pero nosotros nos vamos a centrar en los principales.
El protagonista es Néstor: un chico que está a punto de terminar la secundaria, apasionado por el arte y por el dibujo que se decide participar en un concurso de relatos. Para ello se hace con un nuevo cuaderno y recorre las calles de Granada para inspirarse.
Liam es el novio de Néstor, todo un cerebrito. Culto como el que más, será el encargado de las explicaciones sobre las distintas zonas de Granada que visitarán a lo largo del libro. Está a punto de hacer la selectividad y pasa mucho tiempo estudiando.
Eva es la mejor amiga de Néstor: es divertida y espontánea.
También aparecerán en algunas ocasiones la tía de Néstor y otros personajes algo curiosos pero serán Néstor, Liam y Eva los que protagonicen casi todo el libro.
“Mi tía siempre está muy ocupada, trabaja en una gran multinacional y, como siempre dice, hasta que no rompa el maldito techo de cristal de su empresa no piensa parar. Ese día será épico: mi tía destrozando sin piedad el tejado, gigantescos trozos de vidrio caerán al suelo y se harán añicos. Ella saltará entre los grandes bloques a cámara lenta, como volando en el aire. Su jefe la mirará estupefacto, justo antes de que un gran cristal lo aplaste sin piedad, y ella se colocará en pose de victoria, como una superheroína, y pasará a ser la nueva dueña de la empresa.”
La edición de El chico azul con pies de Hierro
Se trata de un libro corto de 157 páginas, pero en las cuales nos encontraremos con un montón de cosas. El chico azul con pies de hierro se nos presenta en un formato diario en el que Néstor nos comparte su día a día en primera persona y lo va estructurando por fechas.
Como hemos comentado al principio, el autor es ilustrador, por lo que el libro está lleno de dibujos a lo largo de las distintas historias.
Es una novela sencilla en la que los relatos de los distintos días no tienen gran complejidad aunque el autor hace gala de un estilo fresco enfocado a los más jóvenes.
La diversidad en El chico azul con pies de Hierro
A pesar de ser una novela corta y enfocada al público juvenil, trata muchos temas actuales. A lo largo del libro se nos habla de racismo, de orientación sexual, de transexualidad, etc.
El protagonista es gay y viviremos con él cómo se lo cuenta a su tía. Además veremos las distintas fases de su relación con Liam: desde cómo empezaron hasta cómo vivieron el estar separados por la selectividad. En una de las aventuras se les ve tensarse porque los están mirando mientras se dan la mano.
La historia de Eva también es importante pero no queremos revelaros gran cosa para no hacer spoilers.
“Me da un poco de vergüenza reconocerlo, pero si soy sincero, la idea de quedarme encerrado en la ermita a solas con Liam no me desagradaba. Era la oportunidad perfecta de conocernos un poco más. Así que me sentía entre nervioso y emocionado.”
La importancia del arte en El chico azul con pies de Hierro
La ciudad de Granada tiene una gran importancia en este libro ya que a través de los relatos de Néstor podremos saber un poco más de la ciudad y su arte.
Algunos de los capítulos más importantes nos hablan de la Alhambra, la Catedral o la Abadía del Sacromonte. Néstor nos hablará de arquitectura y arte, Liam de historia.
La Alhambra es una ciudad andalusí situada en Granada, está formada por un conjunto de palacios, jardines y la fortaleza del Alcázar. Es uno de los monumentos más visitados de España.
De cada uno de los lugares se nos contará su historia. También se habla de pintores como José Guerrero y escritores como Federico García Lorca.
Además, podremos ver cómo Néstor decide que quiere estudiar el bachillerato artístico, dedicando así su vida profesional a algo que muchos no consideran un trabajo. Sin ir más lejos, su tía no lo toma demasiado en serio cuando le cuenta que se ha decantado por el bachillerato artístico en vez de el científico. Pero distintos artistas lo animarán a lo largo de sus aventuras y además, él ama demasiado el arte como para darse por vencido.
La imaginación de Néstor
La imaginación de Néstor es desbordante, aunque no debería sorprendernos ya que ya nos lo avisan en la sinopsis de la contraportada. Sin embargo, no veremos el verdadero alcance de sus ensoñaciones hasta que leamos su aventuras.
“Eso parecía. Era como si la tierra y el cielo se hubiesen alejado y hubieran dejado al palacio flotando a la deriva, en la nada más absoluta, y la estructura se hubiese desmontado convirtiéndose en cubos de piedra.”
Magia, edificios que cambian, personas que desaparecen, espíritus, dragones, etc. En este libro puede pasar de todo y nunca sabremos qué es real y qué no. El arte se mezcla con la fantasía y las leyendas ayudan a Néstor a componer sus relatos.
“-¿Cuánto de lo que has contado es real?
-¿Tú qué crees?”
Mi opinión de El chico azul con pies de Hierro
Es un libro corto, ya lo he dicho, y precisamente por eso no esperaba mucho de él. Pero estaba muy equivocada porque a pesar de su longitud esta novela tiene mucho que decir.
Usa la fantasía para reivindicar cuestiones de lo más reales y actuales y además nos enseña cultura y arte de Granada lo cual ha hecho que me entren muchas ganas de visitar la ciudad.
Me he sentido muy identificada a lo largo de la novela con Néstor y sus ganas de dibujar y su pasión por el arte me resultan familiares. Sobre todo en el momento en que le dice a su tía que quiere estudiar el bachillerato artístico.
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