Es uno de los libros que más infancias ha podido marcar a la largo de los años, desde que allá por el año 1943 se publicara la novela corta de Antoine de Saint-Exupéry. El Principito es una historia que casi nace para aportar una moraleja, o distintos aprendizajes a todos sus lectores. Nosotros mismos destacamos las mejores frases encontradas en la novela, y que nos dan una idea de su importancia. Por eso mismo muchos la guardan en su haber con tanto cariño. Tal es su éxito que también se produjo, en el año 2015, una adaptación cinematográfica del libro, que no es exactamente igual que lo que podemos leer en estas fascinantes frases. ¿Cuáles son las diferencias entre el libro y la película de El Principito?
Al igual que la novela, la película es de origen francés, apostando por la animación digital y por la animación cuadro por cuadro, pues podríamos decir que se divide en dos fases. El Principito está dirigida por Mark Osborne y el guion, adaptado evidentemente de la novela corta, es cosa de Irena Brignull. Esta adaptación se tomó muy en serio, y aunque está lejos de ser una película de animación de presupuesto desorbitado (como muchas de las que se estrenan año tras año), se trató de cuidar al máximo. De hecho, en el elenco de actores de doblaje encontramos a grandes figuras del cine como Marion Cotillard, que interpreta a La Rosa, o a James Franco, que interpreta al Zorro. Pero vamos a lo que importa, que es el argumento, y donde encontramos diferencias notorias entre el libro y la película desde el primer momento.
El Principito, en su versión del libro, se centra en la historia narrada por un piloto que cuenta sus vivencias de seis años atrás cuando tuvo que realizar un aterrizaje forzoso en el Sáhara. Tuvo que ponerse a reparar su avión para conseguir salir de allí, pero en el proceso conoció a un niño, que resultó ser el Principito de un planeta muy lejano al nuestro. Lo que hace este Principito es contarle al piloto sus vivencias anteriores, las que le terminaron llevando hasta la Tierra, y en el proceso instruye sobre la vida y otras muchas cuestiones morales a nuestro piloto. Antes de llegar a nuestro planeta, cuenta el Principito, tuvo que visitar seis asteroides, donde se encontró a un rey, a un vanidoso, a un empresario, a un borracho, a un farolero y a un geógrafo. Con todas sus vivencias, también cuenta lo que encontró al llegar a la Tierra, y también el aprendizaje que extrajo de una serpiente, una flor de tres pétalos, el eco, un jardín de rosas, un bonito zorro, un guardagujas y un mercader de píldoras especiales que erradican la sed. A través de la conversación entre el piloto y el Principito es cuando descubrimos sus estupendas y ricas historias.
En la película todo cambia bastante, ya que desde el principio se nos presentan a personajes que no están presentes en el libro. De hecho, la protagonista de la historia es una pequeña niña llamada Aurora que estudia en la prestigiosa Academia Werth, y que tiene una madre muy estricta que solo quiere que estudie y se forme como persona allí, dejando de lado otros aspectos como la diversión en casa o con amigos. Un día la niña conoce a un anciano que está arreglando su avioneta en el jardín, cerca de su casa, y poco a poco se terminan haciendo amigos. Este anciano resulta ser el piloto del libro, el que realizó el aterrizaje forzoso en el Sáhara y conoció al Principito. Le cuenta la historia a la pequeña Aurora, que alucina y aprende de las vivencias de ese extraño niño. Tanto le fascina pasar rato con este piloto que se olvida de sus estudios, y su madre no tarda en darse cuenta de ello, prohibiendo a la pequeña seguir viendo al anciano. Un día, Aurora descubre que su viejo amigo se ha puesto muy enfermo, y decide dejar todo atrás con una única meta en mente: encontrar al Principito del que ha escuchado tantas maravillas en sus historias para que pueda ayudar a su amigo.
Como veis, argumentalmente no tienen nada que ver, y aunque el piloto forma parte de la historia en ambos casos, lo hace de manera muy diferente. Es verdad que la película también trata de formar a los pequeños con las historias del Principito, que además se ven en pantalla de manera diferente al resto de la película (en animación cuadro por cuadro), siendo las partes más fieles al libro, pero se añade el componente de historia externa con Aurora en busca de este personaje una vez que el piloto enferma. Ambas son obras muy recomendables para los más pequeños de la casa (y también para los más mayores, por qué no decirlo), pero hay que tener en cuenta que son obras distintas y merecen disfrutarse por separado.
23 comentarios en este post
Deja un comentario
Kinishinaide! No publicaremos tu email ni te spamearemos sin tu permiso