Dragones y apariciones rondan las calles inundadas de Nueva Orleans tras el huracán Katrina. En un universo paralelo, una sociedad utópica evita ser intoxicada por las ideas de nuestro mundo. En el sur de Jim Crow, una madre negra debe salvar a su hija de una hechicera que la condenaría a una vida de servidumbre. Y en la historia nominada al Premio Hugo, «La ciudad que nació grandiosa», un chico de la calle lucha para dar a luz al alma de una vieja metrópolis.
He disfrutado con la gran mayoría de los relatos y algunos me han traído reminiscencias de historias geniales, como el relato de “Caminar despierta” que creo que encajaría perfectamente dentro del mundo de la trilogía de Los ojos bizcos del sol. Pero tampoco podemos negar que algunos hasta me ha costado terminarlos y me he visto tentada a saltarme las páginas.
Así que… sí, La ciudad que nació grandiosa te gustará si conoces a Jemisin, si has leído otras obras de ella y si sabes ser paciente a la hora de introducirte en sus relatos. No todos merecen la pena, pero los que sí marcan la diferencia.