¿Eso quiere decir que Kabi se ha recuperado de su depresión? Probablemente no y ya hemos visto que el éxito de alguna de sus obras no sirve para que levante cabeza y se sacuda de encima su síndrome del impostor. Pero desde aquí solo podemos esperar que Kabi, por fin, encuentre su camino para poder seguir escribiendo mangas. Y que la gente tan maja de Fandogamia, nos los siga trayendo.