El cazador de Meletea es una novela negra indie que te encantará

El cazador de Meletea es una novela de tecno-thriller con tintes de terror escrita por el autor tinerfeño Greg A. Oslo. La obra nos cuenta la historia de varios personajes y la relación que éstos tienen con Meletea, que está esperando pacientemente a poder mostrar todo su poder.

Resumen de El cazador de Meletea (¡OJO CUIDAO, spoilers a puntapala!)

La historia comienza pocos días después del accidente nuclear de Chernobyl. Rafael Abasolo, un científico español, que ha viajado hasta la zona para ayudar junto a su padre, Emilio (también científico) se encuentra una noche a una campesina tremendamente desfigurada por la radiación. A pesar del rechazo, Rafael se ve incapaz de alejarse de la campesina quien, tras abrazarle, provoca que él se desmaye. Éste sería el primer encuentro de Abasolo con Meletea.

Varias horas después, Emilio Abasolo, ayudado de un militar llamado Kotov encuentran a Rafael junto a la chica, y experimentan una sensación similar a la sufrida por Rafael, pero sin llegar a desmayarse. Deciden en ese momento realizar investigaciones científicas con la chica y crear una empresa, Korova Genetics.

Varios años después, tras un incidente con Meletea que acaba con la vida de varios investigadores, Emilio Abasolo decide, tras ordenar precintar el laboratorio para que nadie entre, recluirse una semana dentro del mismo para investigar, poniendo en riesgo su vida. Pasada esa semana, abandona el laboratorio sin aparentes daños, y decide encargarse personalmente de la investigación del Proyecto Mnemea.

Pocos años después, su aspecto físico está altamente deteriorado y, tras realizarse varios estudios médicos, los resultados son altamente llamativos: está perfectamente sano, pero sus funciones cerebrales van a toda potencia, al igual que sus células, las cuales están provocando en él un envejecimiento prematuro. Varios meses después de dichos estudios, Emilio Abasolo fallece y su hijo Rafael decide continuar con el proyecto.

Pasado un tiempo, roban a Meletea de Korova Genetics. Tras el robo, Rafael vuelve angustiado a casa y llama a un número de teléfono que le pone en contacto con el coronel Kotov. Éste le cuenta que con Meletea y el llamado Proyecto Mnemea, querían crear un programa de creación de seres humanos perfectos, pero el Estado dejó de apoyarlos. Pidieron mecenazgo a la Bratva, y Semion Luzhin impulsó a Korova Genectics extorsionando a empresas rivales, firmando contratos inflados con gobiernos extranjeros… Al final Luzhin se convirtió en el dueño del 66% de las acciones de Korova Genetics.

Rafael llega a la conclusión de que seguramente haya perpetrado el robo alguien de la gente de Luzhin, y han robado a Meletea porque casi se puede hacer simbiosis entre Meletea y un humano con suficiente garantía de éxito. Kotov revela que Luzhin quiere a Meletea porque se está muriendo y quiere realizar una evolución y sustituir su cuerpo. Asímismo, le dice a Rafael que conoce a una neurobióloga llamada Irina Jovovich que no está bajo influencia de Luzhin y que les puede ayudar, porque ha informado al Servicio de Espionaje ruso (del que Kotov forma parte) del proyecto Mnemea, y que en 48 horas tendrá noticias suyas. Rafael cuelga el teléfono y espera angustiado.

En la misma línea temporal, pero en un espacio diferente, nos encontramos con Uriel, un exsoldado ruso que se encuentra sumido en una depresión tras el fallecimiento de su mujer Natasha en un accidente de avión. No es la primera vez que Uriel tiene que tratar con la muerte, pues siendo él pequeño, su madre falleció inesperadamente mientras le llevaba al colegio, sin que nadie pudiese ayudarla.

Pues bien, una noche alguien llama a la puerta de Uriel y resulta ser un miembro de la Spetsnaz, que acaba secuestrando a Uriel y llevándolo a la mismísima ciudad de Prypiat. Allí se entrevista con un grupo de personas, entre los que se encuentra una neurobióloga llamada Irina Jovovich, tres miembros del Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB), encabezados por un hombre apodado Zero, y el ahora coronel Kotov.

Tras una discusión, el coronel Kotov es disparado por Irina y Zero le cuentan a Uriel toda la historia: La organización de Luzhin se ha puesto en contacto con el FSB porque en una de sus empresas, Korova Genetics, han robado un objeto importante. La organización que lo ha hecho se llama Nuevo Orden Mundial. Esta organización está relacionada con la muerte de Natasha, mujer de Uriel, pues en la lista de embarque del avión donde murió ella figuraba un biofísico llamado Aleksis Soloviov, que había trabajado con Rafael Abasolo, y que Uriel conocía por ser compañero en el ejército. Las investigaciones de Aleksis despertaron el interés del NOM por él, pero en vez de secuestrarlo estallaron el avión para asustarle. Pero Aleksis no murió, sino que tiempo después fue visto en África.

Kotov, al mismo tiempo de que el FSB recibió la noticia del robo, le contó a la doctora Irina Jovovich lo ocurrido (pues mantenían una relación sentimental), pero ella ya lo sabía porque la Bratva tenía un topo en el grupo de trabajo de Rafael. Kotov creía que se entrevistaría con miembros del FSB no corruptos, pero al ver que sí que estaban relacionados con la Bratva, no quiso colaborar y acabaron con su vida.

La cuestión es que tanto Kotov como Semion Luzhin buscan recuperar a Meletea, uno para evitar que caiga en manos de Luzhin y el otro para recuperar fuerzas.

¿Y por qué han escogido a Uriel? Por ser buen militar, porque conocía a Aleksis (que está en Tarifa, pueblo donde Uriel nació) y por vengarse de quienes mataron a su mujer. Uriel cambia el chip y se deja llevar por su atormentada personalidad. Finalmente, Nikolai (el spetsnaz que había secuestrado a Uriel) y la doctora Jovovich lo acompañarían para recuperar a Meletea y dársela a Luzhin.

Durante el viaje en avión hacia su destino, Jovovich le cuenta a Uriel unos últimos trazos de la historia: El topo en el equipo de Rafael es una científica llamada Elena Bayona quetambién es amante de Luzhin. Semion la obligaba a mantener sexo con Rafael para tenerlo aún más maniatado. Irina también le cuenta a Uriel la historia de Meleta, que es algo así como un flujo de energía capaz de penetrar en el cerebro de cualquier sujeto para instalarse y devorarlo sin piedad. Se supone que Meletea es ADN energético, es decir, que en el ADN existe una consciencia trascendente que puede seguir existiendo después de finalizar su realidad biológica. Algo así como el “alma”. Pues este ADN sufre dolor por el constante cambio de sus patrones energéticos durante sus millones de años de vida, y durante 6000 años los humanos se han debatido en guerras. Por tanto, al estar padeciendo violentas sensaciones, crueldad y salvajismo durante tantísimo tiempo, el mal ha dejado de ser un concepto abstracto para transformarse en algo vivo. En resumen: Meletea es el concepto de “mal” hecho ser vivo.

Volviendo con Rafael, ya han pasado las 48 horas y tres desconocidos se han presentado en su casa. Mientras se dirige a verlos, mentalmente se nos desvela algo sorprendente: Todo estaba meticulosamente calculado por Rafael. Sabía que Luzhin estaba interesado en Meletea, por tanto creó la organización Nuevo Orden Mundial y “contrató” a Aleksis para perpetrar un robo y así evitar que Luzhin se hiciese con Meletea, sin que nadie supiese nada.

Cuando llega a su despacho, se encuentra con Irina, Nikolai y Uriel quien, sin mediar palabra, asesina a Nikolai y a la doctora. Obliga a Rafael a que le siga y ambos viajan a donde se encuentra Meletea, es decir, al hotel donde vive Semion Luzhin.

Al llegar a la habitación del hotel, ésta se transforma en una especie de cueva, encuentran a Luzhin, que ya ha sido poseído por Meletea, y a Elena Bayona. Es en este momento cuando el lector descubre el giro final: Uriel ha estado poseído por “otra” Meletea desde pequeño (de hecho fue él quien mató a su madre involuntariamente). Uriel y Luzhin se unen para crear un ser perfecto juntándose ambas Meleteas. Rafael, por su parte, intenta acabar con este ser (que ya no es ni Uriel ni Luzhin) de un disparo, pero Elena Bayona se interpone y recibe el balazo. Rafael, no deseando acabar como su padre, se suicida.

Finalmente, y al día siguiente de los hechos, Zero va al hospital a visitar a Elena Bayona y  no puede ocultar su alegría al ver que ésta también está poseída por Meletea.

Hablemos de la novela en general y mi opinión en particular

La obra cuenta con 29 capítulos. Cada uno de ellos se centra en un personaje, por lo que puede recordar, salvando las distancias, a novelas como Juego de Tronos. Los capítulos no son demasiado largos (a excepción de un par de ellos donde se desvelan partes importantes de la historia), pero la narración de Oslo es tan buena que el lector devora los capítulos casi sin darse cuenta.

Sin duda la trama consigue enganchar al lector desde el primer momento, creándole siempre las ganas de querer saber un poquito más. Ayuda mucho a esto el hecho de que la historia presente a varios personajes cuyas tramas están entrelazadas o que la novela tenga unos tintes muy cinematográficos, con finales de capítulos que son verdaderos cliffhangers.

Algo que me ha llamado mucho la atención son las exquisitas descripciones que nos brinda el autor de lugares como Tarifa o el hotel donde se desarrolla el final del libro, las cuales no se hacen para nada pesadas. Éstas muestran un trabajo de documentación por parte del autor digno de quitarse el sombrero.

Por otra parte, los personajes, a pesar de ser varios, están realmente bien construidos. Todos evolucionan de una forma a otra, y podemos ver desde cambios en la forma de actuar debido a un desencanto con la evolución que ha sufrido la sociedad, a los efectos que el terror puede provocar en un rudo mercenario. Además, los diálogos son verosímiles con los personajes. A pesar de ser una novela, como ya hemos dicho, muy “cinematográfica”, ninguno de los personajes suelta alguna frase demasiado peliculera mientras se coloca las gafas de sol como si de un capítulo de CSI se tratase.

Especial mención a las diversas referencias a la cultura pop, que ya te puede meter una película de Paul Newman, hacer una mención a Chuck Norris o, directamente, introducir unas estrofas de una canción de El Drogas.

Pero no todo iba a ser bueno, ¿no?

Si hay algo que me ha “decepcionado” es que, en la segunda mitad de la novela, la trama se queda estancada. Parece que va a desarrollarse más, va a haber más historia, más misterio… pero se viene abajo, dejando al lector con ganas de más. Otro aspecto que no me termina de convencer es que el final ocurre muy de sopetón. Es decir, hemos tenido cinco capítulos que eran puro contexto (uno de ellos nos hablaba del padre de Uriel) ¿y el final lo resuelves en apenas dos capítulos (uno si solamente cuentas lo ocurrido en el hotel) y todo a la carrera? Pues bueno, no está mal, pero me hubiera gustado que el final estuviese algo más desarrollado, que lo pudiese disfrutar un poco más.

Opinión personal

Estás tardando en comprarte este libro y leerlo. Una edición sencilla pero resultona en digital, alrededor de 370 páginas, capítulos que te hacen querer leer más, una trama interesante que engancha, saber cómo están relacionados los distintos personajes y un estilo a la hora de narrar que te introduce suficiente información sin llegar a ser denso. Eso sí, al ser una trama entrelazada, has de estar atento a lo que se lee, pues puedes perder algún detalle importante.

No es ninguna obra maestra, pero sí que hará las delicias de los amantes del thriller y la ciencia ficción. Tiene sus fallos, pero no son graves a la hora de valorar todo el conjunto, por tanto no puedo dejar de recomendar su lectura.