Está claro es que Corazón de escamas no es una novela que vaya a cambiar el mundo y que puede pasar por una historia como otra cualquier en manos de cualquier persona que no quiera mirar más allá. Pero es mucho más. Porque al fin y al cabo, estoy segura de que una bestia como la del libro alberga dentro de cada uno de nosotros, esperando a ser perdonada, esperando a salir al muelle y tomar una fuerte bocanada de aire con sabor a libertad.
Gracias a Georgia de Promoción de libros por habernos facilitado un ejemplar de Corazón de Escamas. Siempre nadaremos a tu lado.