La historia interminable, análisis del clásico de Michael Ende

La historia interminable es la obra más famosa de Michael Ende y uno de los clásicos de la literatura infantil y juvenil más queridos de todos los tiempos. Hoy, en esta reseña, vamos a desgranaros el argumento de la obra, sus altibajos y qué elementos la han llevado a convertirse en un imperdible en Europa.

Argumento de La historia interminable 

Bastian Baltasar Bux es un joven gordo y sin amigos que pasa la mitad del tiempo huyendo de sus compañeros de clase y refugiado en los libros. Un día, casi por accidente, acaba dentro de la librería de un viejo cascarrabias que está leyendo un extraño libro con tapas de cuero. Sin saber muy bien por qué, Bastian acaba robando el libro, refugiándose en el desván de su colegio y tomando la decisión de no volver a salir de allí hasta terminar el libro. 

Dentro de esas tapas de cuero, Bastian se encontrará con un mundo poblado por todas las criaturas e historias de fantasía que jamás hayan existido. Allí conocerá a la Emperatriz Infantil, una dulce y poderosa niña con una enfermedad incurable; y al valiente Atreyu, el héroe designado para encontrar la salvación a su mundo.

Un poco sobre la obra, el autor y su contexto 

La historia interminable se trata en realidad de una alegoría fantástica que se nutre de las historias y tópicos del género desde la primera página. Escrita a dos colores (en esta edición de Loqueleo emplea el rojo para mostrar la perspectiva de Bastian y el azul para hablar del contenido del libro), su autor, Michael Ende, emplea un lenguaje sencillo y muy descriptivo para tratar temas de profunda complejidad como ya había hecho seis años antes con la publicación de Momo

La historia interminable es mundialmente conocida gracias a la adaptación cinematográfica de la obra en 1984, cuyo final se ubicaba justo en la primera mitad del libro. Esto no deja de ser una pena, ya que se pierde la moraleja y la lección que Michael Ende esconde a lo largo del texto y que apela directamente al niño-lector que hemos sido todos, rompiendo continuamente la división que hay entre lector e historia y permitiendo crear la ilusión de que todos podemos formar parte de La historia interminable. 

Bastian es el meta-lector por excelencia, la encarnación de todos los niños que somos y que soñamos con poder entrar en el interior de las páginas de nuestra obra favorita. 

La edición de La historia interminable de Loqueleo no puede ser más maravillosa. No solo se ha rediseñado la portada para mostrar la Torre de Marfil y las serpientes de AURYN mordiéndose la una a la otra, sino que además cada comienzo de capítulo incluye la primera letra con una decoración especial y el texto está preciosamente impreso en rojo y azul, haciendo que la experiencia de lectura sea simplemente maravillosa. Al mismo tiempo, esta edición incluye un párrafo inédito que se le olvidó traducir originalmente al traductor oficial de la obra. 

Para poder hablaros de todo lo que esconde la obra, no nos queda más remedio que realizar este análisis con spoilers sobre toda la trama. A partir de esta sección se revelará información sobre la obra desde el principio al final. 

La vida y la muerte, los ciclos y el flujo constante de historias 

La historia interminable es una obra de aventuras y especialmente su primera mitad nos permitirá acompañar a Atreyu y su caballito por parajes misteriosos y conocer a todo tipo de criaturas; pero también es una alegoría que esconde temas profundos y siniestros y grandes enseñanzas sobre la vida.  

Una de ellas es la propia existencia del mundo de Fantasia: un reino que existe de forma simultánea al de los humanos y donde conviven no solo las historias y los cuentos, sino también la esperanza y la verdad de todo el mundo. Michael Ende y La historia interminable nos muestran a través de la enfermedad de la Emperatriz Infantil y la búsqueda de un humano de Atreyu, lo necesario que es para los seres humanos mantener la tradición de contarnos cuentos y plantear historias cargadas de maravillas. Cada vez que alguien en el mundo real consigue evadirse en una historia de fantasía, Fantasia se hace más rico y colorido, creando un ecosistema cargado de luz, esperanza y color donde hay sitio para todo el mundo. 

La relación entre ambos mundos es completamente unidireccional. Occidente y el mundo de los humanos tal y como lo vivimos, cada vez tiene menos tiempo para los cuentos y las historias emocionantes, de forma que Fantasia se va consumiendo en una Nada que destroza a quien la contempla. De esta forma, Michael Ende vuelve a realizar una crítica al mundo capitalista como ya había hecho en Momo, postulando que la falta de cuentos e historias generará un daño completamente irreparable no solo en Fantasia, sino también en nuestro mundo. No olvidemos que los personajes de Fantasia cuando abandonan su mundo pasan a la tierra convertidos en mentiras. Y cuánto más poderoso sea un héroe en Fantasia, más grande será el daño que hará en el mundo (de manera que el autor hace un increíble símil comparando la xenofobia y muchos argumentos de la política más extrema con simples cuentos corrompidos). 

Al mismo tiempo, es fácil comprender que el mal que acontece en Fantasia hace referencia al ciclo de la vida y la muerte, no solo de los seres vivos sino también de las ideas, las creencias y las civilizaciones. El oráculo le explica al mismo Atreyu que La Emperatriz Infantil había estado enferma en más ocasiones, y que esto siempre trajo la casi destrucción del mundo de Fantasia hasta que un humano la salva dándole un nuevo nombre. Esto es exactamente lo que ocurre cuando Bastian la apoda como Hija de la Luna y provoca que Fantasia en sí misma desaparezca y vuelva a generarse bajo sus propios deseos. Es exactamente lo mismo que le ocurre a Graógraman, señor de la Muerte Multicolor, que debe morir cada noche para que la selva de Perelín viva, y volver a nacer por la mañana para que vuelva el desierto. 

Un detalle realmente interesante de la obra es precisamente el hecho de que los personajes de Fantasia no tienen edad. Cuando Bastian le pregunta a cualquiera de ellos cuánto tiempo llevan viviendo, estos contestan que “desde siempre”. Ocurre algo similar con las ideas, los cuentos y las historias, que no tienen un nacimiento propiamente dicho y cuya generación es imposible de rastrear (es muy difícil encontrar el nacimiento de cuentos populares, pero también el de ideas como el racismo). 

La Emperatriz Infantil es realmente una metáfora sobre Dios y Bastian una sobre el poder corrupto. 

Una de las figuras más interesantes de la propia novela es La Emperatriz Infantil y el misticismo que la rodea. Pero ¿cómo no iba a ser así? La joven que más tarde se llamaría Hija de Luna, es nada más ni nada menos que la encarnación de Dios en Fantasia. Es fácil ver este símil si estás atento a los detalles: La Emperatriz Infantil es la única que no envejece, que ha estado desde siempre en la tierra y que tiene el poder de la creación y la destrucción. Al mismo tiempo, la joven, que ilumina el rostro de cualquiera que la contemple (algo similar ocurre en los testimonios bíblicos de aquellos que han podido contemplar a Dios), siempre se ha posicionado como una figura completamente neutral. No hace distinción entre buenos y malos, dándole a cada cual su espacio y su libre albedrío en Fantasia. 

Las decisiones de La Emperatriz Infantil, al igual que las de Dios, no son fácilmente comprensibles. De esta forma, la mujer envía a Atreyu en una misión prácticamente suicida, siendo este un niño, sin proveerle de las herramientas necesarias para que pueda sobrevivir. Atreyu se guiará de esta forma movido únicamente por la fé, como hacen muchos de los enviados de Dios en la Biblia. De hecho, varias de las pruebas como la de las esfinges o la del espejo que debe superar Atreyu para visitar al Oráculo del Sur solamente se pueden superar teniendo una fé inquebrantable en tu misión. 

Al mismo tiempo, La Emperatriz Infantil vive en La Torre de Marfil, en el Pabellón Magnolia: un lugar que representa un plano mental superior o el mismo paraíso al cual no están invitados aquellos que no son dignos (recordemos cómo Bastian hizo todo lo posible por ascender de forma bruta y malvada, sin conseguirlo). 

Bastian Baltasar Bux es también una representación bastante directa sobre el poder corrupto. Cuando llega a Fantasia y se le entrega el poder de la creación, cada uno de los deseos que le concede Auryn lo lleva un poco más lejos a su destrucción completa. Bastian, al igual que los líderes políticos corruptos y malvados, va creando una leyenda a su alrededor y organizando una comitiva de miles de criaturas que le siguen y lo adoran. La corrupción de Bastian la va provocando el poder sin límites, su falta de recuerdos (lo cual le impide tener una perspectiva del daño que realiza) y, sobre todo, las malas compañías de las que se rodea (los caballeros ociosos y malvados y sobre todo Xayide). 

La depresión, la muerte y el pantano de la tristeza 

Al igual que en otras obras de Michael Ende, La historia interminable guarda sabios consejos e información sobre el peligro de la depresión y de dejarse abandonar por la tristeza. Al igual que la enfermedad mental, que te va arrastrando hasta desaparecer por completo y morir, la Nada que asola Fantasia va atrayendo a todos los seres con una fuerza irremediable que les induce a saltar al vacío y dejar de vivir.

Atreyu, en el camino del héroe, tendrá que ir superando pruebas, a cada cual más ilustrativa que la anterior. El Pantano de la tristeza es una metáfora completa de la pena y la depresión que acaban por absorber a Ártax, el caballito de Atreyu. Al mismo tiempo, Michael Ende nos explica que es necesaria la muerte para poder valorar la vida, tal y como le ocurre a la Morla, la cual es tan anciana que ya nada le importa (ni siquiera la destrucción de Fantasia)

E incluso la necesidad de desear cosas para poder avanzar en la vida como metáfora sobre la depresión, la cual te priva por completo de deseos y voluntades. 

Mi opinión personal sobre La historia interminable 

Tengo sentimientos muy encontrados con La historia interminable, un clásico de la literatura. Por un lado, la primera parte me pareció sumamente brillante y, como Bastian Baltasar Bux, no pude dejar el libro ni un minuto para dormir o comer. Las aventuras que vives al lado de Atreyu y el mundo que te va mostrando Michael Ende tiene algo maravilloso y encantador que recuerda a Alicia en el País de las Maravillas por la variedad de sus personajes y que simplemente es capaz de enamorarte. 

Es la segunda parte del libro con la que no estoy tan contenta. En el momento en el que el punto de interés se centra en Bastian y su reformado y guapo cuerpo, el ritmo de la obra decrece drásticamente y las extensas descripciones, que antes no eran necesarias ni siquiera para transmitirte el peligro del pantano de la tristeza o la riqueza de ambientes y personajes, pasan a ser largas y pesadas.

Y es toda una pena, pero creo, desde mi punto de vista personal, que a la segunda parte de La Historia interminable le sobran un poquito más de cien páginas. Entiendo que el mensaje potente de la obra está precisamente en la venida y corrupción de Bastian, pero las páginas y el desenlace de la historia se hicieron tan lentos para mí que empobrecieron mi opinión final de la obra y me obligaron a tomarme largos descansos para poder seguir leyendo. 

Quizás esta es la obra más famosa de Ende, y sin duda su principio es maravilloso. Pero yo, personalmente, me quedo con Momo.