Alina Starkov no espera mucho de la vida. Se quedó huérfana después de la guerra y lo único que tiene en el mundo es a su amigo Mal. A raíz de un ataque que recibe Mal al entrar en La Sombra, una oscuridad antinatural repleta de monstruos que ha aislado el país, Alina revela un poder latente que ni ella misma sabía que tenía. Tras ese episodio, Alina es conducida a la fuerza hasta la corte real para ser entrenada como un miembro de los Grisha, un grupo de magos de élite comandado por un individuo misterioso que se hace llamar El Oscuro.
El libro se hace corto y arranca en ti una necesidad de seguir leyendo para descubrir cómo avanza la trama. Es cierto que la magia puede llegar a ser limitada y que algunas cosas del worldbuilding no acaban de encajarme pero, oye, sin duda la trilogía promete y hace que comprenda de dónde viene todo ese éxito que está cosechando.
¿Brindamos juntos por la segunda parte con kvas?