Tres relatos turbadores que penetran en la mente femenina para desvelar sus misterios y su talento para la maldad. Las tres protagonistas de El infierno de las chicas intentan sobrevivir en un mundo sórdido sometidas a la voluntad de los hombres mientras vagan por un retorcido laberinto de engaños, intrigas y callejones sin salida construido con maestría por uno de los escritores más innovadores de la literatura japonesa moderna. Kyusaku Yumeno fue un escritor de misterio admirado por su oscura imaginación y por su talento para ir más allá de los límites establecidos para el género. Comparado frecuentemente con Kafka y Poe, sus obras inquietantes, atrevidas y de estilo inconfundiblemente bizarre reciben hoy el reconocimiento del que su autor no pudo disfrutar en su tiempo.
Sin poder darme cuenta de ello, ya había devorado ⅔ de este librito, impreso en una edición tan preciosa y cuidada como siempre, sin haberme dado tiempo todavía a saborear las mentiras de Himegusa; la advertencia a Chieko o la extraña decisión final de Tomiko. ¡Qué extraño ha sido leer cómo las mujeres altas eran despreciadas en la época, cuando hoy en día forma parte del canon de belleza de prácticamente todo Occidente! Y qué fascinante fue descubrir que las relaciones lésbicas en el Japón del S.XX eran consideradas como un entretenimiento normalizado. Y es que, como en todas estas obras que recogen historias, mis favoritas giraron siempre alrededor de los personajes más complejos de todos, los más mentirosos y los más decididos.
El dicho en Japón reza que «quien empieza por mentir acaba por robar» y debe ser francamente cierto. Porque de nuevo, otra obra de Satori, me ha robado el corazón.