San Agustín de la Florida. 1740. Samuel Durango, español de origen africano y habitante de Fuerte Mosé el primer asentamiento de negros libres de Norteamérica, es capturado por los caciques esclavistas de las colonias británicas. Indignada por la decisión de su padre de no acudir en ayuda del joven, Teresa de Montiano, la hija del gobernador, contrata en secreto a un excéntrico capitán cuyas acciones están a punto de desencadenar una guerra. Juntos inician un arriesgado viaje que tiene como fin entrar en las inmensas plantaciones azucareras de Carolina, encontrar al joven Samuel y liberar al resto de hombres esclavizados por el contrabandista Caleb Davis. Mientras tanto, en la Florida española, los demás negros de Mosé y los españoles de San Agustín se preparan para defender la ciudad ante la llegada inminente de fuerzas invasoras. Santiago Mazarro, que ya sorprendió a la crítica con su primera novela, vuelve a destripar las entrañas de la América colonial con una historia de aventuras trepidante, bien documentada y a todas luces necesaria para entender el legado multicultural del continente.
Me pareció todo un acierto la forma con la que Santiago Mazarro construye los diálogos y las conversaciones de los británicos, demostrando una crueldad cargada de matices sin ser demasiado obvia; y mentiría si dijera que no lloré un poquito con el final.
Sin duda alguna El fuerte de la Florida es un libro que recomendaría para todos los que busquen una obra cargada de aventuras y de sorpresas.