Verano de 1980 en Cleveland, Ohio. Phoebe Shaw, y su prima y mejor amiga, Jacqueline, acaban de graduarse en la escuela de secundaria en medio de un futuro del todo desalentador e incierto. Toda la ciudad está copada de fábricas abandonadas que pueblan el horizonte, y la sombra de una huelga sobrevuela la rutina que gobierna sus vidas...
Pero, nada de eso es equiparable a lo que está ocurriendo en su propio vecindario. Las chicas con las que Phoebe y Jacqueline han crecido, están mutando. El pistoletazo de ese cambio lo dará el descubrimiento de unas oscuras huellas acuosas sobre la acera. Una a una, las jóvenes se van marchitando: sus uñas se transforman en cristales rotos, y sus huesos se convierten en metales oxidados que corrompen su carne.
Nadie puede explicar qué es lo que pasa con las chicas de la calle Denton; nadie, salvo quizá ellas mismas