Héroe de guerra y agente del servicio de seguridad de la Unión Soviética, Leo Stepánovich Demídov cree ciegamente en la propaganda oficial, que sostiene que su país es el paraíso de la igualdad y la fraternidad sobre la Tierra, una alianza de ciudadanos libres y trabajadores prósperos que merece la pena defender de sus múltiples enemigos con todos los medios imaginables, incluidos la delación, la represión y el castigo severo a los infractores. Pero el día que lo obligan a espiar a su propia esposa por supuesta traición a la patria, a Demídov comienza a caérsele la venda de los ojos.